Año: 2023
Ubicación: Campus Universidad Católica Andrés Bello, Caracas, Venezuela
Mención Honorífica en el Concurso Pabellón Multipropósito UCAB 70 Años
Equipo: Maya Suárez, Eduardo Villavicencio, Andrés Montaldo y Daniel Zambrano
Descripción:
El cuadrado es una propuesta formal y poética para el jardín de la UCAB. Se trata de un ejercicio de la forma dentro de la forma, dónde se consigue el orden a través de contraste entre lo regular y lo irregular, lo ortogonal y lo curvo.
Un techo verde se mimetiza con el paisaje botánico del sitio y construye la continuidad visual con el entorno. La losa plana de hormigón se eleva sobre un bosque de pilares pantalla revestidos de acero pulido que reflejan la vegetación circundante. La cubierta parece flotar en el aire, desafiando la gravedad y la materialidad.
Una horadación en su superficie deja pasar un árbol existente y define un patio que atrapa parte del jardín en el interior. Este vacío es un gesto de respeto y de diálogo con el lugar, una apertura al cielo y a lo sagrado.
El espacio interior se prolonga hacia el exterior con un disco de grava que crea una zona intermedia entre lo construido y lo natural. Es una transición fenomenológica que invita a experimentar el pabellón desde diferentes perspectivas y distancias.
Lo techado y lo destechado constituyen un espacio único versátil y adaptable capaz de albergar distintas actividades y usos: brindis, reuniones sociales, clases, talleres, ferias, exposiciones, conciertos, conferencias. El proyecto construye una plaza techada que sirve de umbral de acceso, espacio de tránsito y de permanencia, un lugar que vincula los edificios y jardines que lo rodean. Así, El cuadrado es una plaza-puente que propicia el encuentro, la interacción y el intercambio.
Con pocos elementos se pretende lograr una intervención contundente desde los puntos de vista formal y espacial. Rodeado de edificios de distintas épocas, funciones y estilos se busca crear un lugar que por su sencillez se integre al conjunto sin buscar protagonismo, pero imponiendo su propio orden y carácter. Formas puras, geometrías claras y materiales expresivos son la clave de un proyecto que se resume en dos planos horizontales y un volumen vacío entre ellos, donde la sombra es su razón de ser.
Es una obra que respeta y dialoga con el lugar, que crea continuidad y contraste, que articula y comunica, que invita y acoge. Es una obra que, más que un objeto, busca ser un acontecimiento.